El Precio y El Valor de las cosas

El precio y el valor de las cosas, no siempre van de la mano. Uno puede pensar en el precio de algo como demasiado alto, sin embargo, otra persona puede ver el valor de la misma cosa como una ganga. Seth Godin dio este ejemplo en algo que leí hace un par de días.

El escribió de algo que le sucedió a uno de sus profesores de la Universidad. Este señor era un Ingeniero y hacia trabajos de consultoría. En una ocasión le hablaron de una compañía, que acababa de construir un edificio de 40 pisos en Boston, pero tenían un gran problema.

Un Gran Problema 

Había manchas de color café que salían de todas las paredes dentro del edificio. Estas paredes estaban hechas de tablas de yeso (“drywall”, como se conoce en ingles). La compañía había tratado muchísimas cosas, pero nada lograba quitar las manchas. En un edificio de este tamaño, reemplazar todas las paredes costaría varios millones de dólares.

La compañía contrato a este hombre como último recurso, el día antes de comenzar a tirar todas las paredes y tener una pérdida millonaria. El entro al lugar, miro las paredes y dijo, “yo creo que puedo encontrar una solución, pero les va a costar $45,000, si es que puedo resolver la situación”.

Instantáneamente lo contrataron, ya que si tenía éxito, el proyecto se salvaría.
Este hombre procedió a pedir un papel y un lápiz, escribió el nombre de un producto químico muy conocido, que se consigue prácticamente en cualquier ferretería. Le entrego el papel a las personas que lo contrataron y dijo: “aquí tienen, esto va a quitar las manchas”. Y procedió a cobrar su cheque de $45,000.

Impresionante salario

Impresionante salario por 15 minutos de su tiempo. Pero también Impresionante ahorro para la compañía. En una hora resolvieron la situación que los había llevado al borde del desastre.

Lo que para unos sería impensable, $45,000 por unos minutos de trabajo. Para esta compañía significo un ahorro de millones de dólares. El precio del trabajo de este hombre, en nada se compara, con el valor de lo que logro para esta compañía.

Cuando hablamos de finanzas personales no debemos olvidar, el precio y el valor de las cosas. Puede ser muy fácil para una persona que está tratando de poner sus finanzas en orden, el pensar que no puede gastar nada de dinero. Hay que ahorrar, ahorrar y ahorrar. Y aunque es cierto que tenemos que cambiar nuestra forma de gastar dinero, también tenemos que reconocer que es posible invertir en cosas que tienen valor para uno.

La Parte Personal 

Esta es la parte personal, de las finanzas personales. Lo que para mí es valioso, no necesariamente es lo mismo, que para ti es valioso. Por eso, si hablas con un asesor financiero y esta persona solo habla y habla, dando consejo tras consejo, sin escuchar tu opinión. Necesitas buscar a alguien más. Necesitas buscar a una persona que sepa escuchar, que tome en cuenta, no solo tu situación financiera; pero también lo que es importante para ti.

Para otra persona puede ser muy fácil decirte lo que necesitas hacer, tienes que dejar el cable TV, no puedes comprar ropa por los próximos tres años, solo vas a poder comer una vez cada tres días, etc. Para otra persona es fácil decirte esto, el no lo va a hacer, el no va a sacrificar nada.

Mi trabajo como coach financiero, no es tanto el decirte lo que tiene que hacer, como el escucharte y el ayudarte a tomar las decisiones correctas, para que tomes control de tus finanzas. El cambio lo tienes que hacer tú. Un buen coach financiero te dará las herramientas para que entiendas donde estás y hacia donde debes ir financieramente. Pero también va a caminar junto ti, dándole valor a lo que es importante para ti y así no permitir que tu vida termine desbalanceada.