Como enfrentar una crisis de dinero
“Image courtesy of David Castillo Dominici / FreeDigitalPhotos.net”.
Primero, es importante separar la realidad de los sentimientos. Los sentimientos que vas a experimentar pueden destruir tu matrimonio. No lo permitas. Este es el momento de buscar soluciones, no de buscar culpables.
Después de la crisis vas a tener tiempo de poner los límites necesarios para evitar que esto vuelva a suceder. Ahora hay que resolver el problema.
El primer paso para enfrentar esta crisis va a ser el poner tus sentimientos a un lado. Esto se va resolver racionalmente no emocionalmente. Piensa que le estas ayudando a otra persona a resolver su situación.
Comienza escribiendo todo lo que debes. Incluye cosas como la comida, gasolina y medicamentos. Divide estos gastos en dos listas. Lo que necesitas y lo que puede esperar.
Una necesidad es un gasto necesario que si no pagas puede producir consecuencias severas o aun poner la vida en peligro. Lo que quiere decir que no es cualquier cosa. Usa esta regla como referencia para decidir cuál de los gastos pagar primero.
Las necesidades primero
Paga lo necesario primero, aun si los cobradores de los gastos que pueden esperar están ladrando por todos lados. Ahora pon las necesidades en orden de importancia.
- Necesidades de la familia. Comida, medicamentos, seguro de salud, etc.
- Vivienda. Si no pagas la casa vas a terminar viviendo en la calle.
- Servicios básicos. Agua, luz, gas, teléfono, etc.
- Pago del auto. Si no tienes otra forma de llegar a trabajar el auto es una necesidad (siempre y cuando recuerdes que no solamente un BMW te puede llevar al trabajo).
- Manutención de tus hijos. El pagar la manutención de tus hijos no es negociable. Aunque no vivan contigo, también comen. Es tu responsabilidad. Recuerda que desde la cárcel va a ser mucho más difícil ponerte al día en tus cuentas.
- Impuestos. Si el gobierno federal está a punto de quedarse con tu cuenta de banco, tu cheque, tu casa y hasta tu ropa interior. Necesitas llegar a un arreglo con ellos y pagarle a esa gente de inmediato.
- Préstamos estudiantiles que están atrasados. Una vez más con el gobierno federal no se juega. Los prestamos universitarios con respaldo del gobierno federal, los tienes que pagar. Ni siquiera una bancarrota te los quita. Y la única agencia de cobros que es peor que el IRS es la que cobra estos préstamos.
Lo que puede esperar
Estos son gastos que pueden esperar un poco ya que el efecto de no pagarlos no va a ser devastador. Todavía debes el dinero, vas a pagar recargos y tu crédito ser va ser trizas.
De ninguna forma estoy sugiriendo que no pagues las cosas que debes. Solamente estoy hablando de prioridades. La cruda realidad es que un mal crédito es mejor que el perder tu casa y aun tu carro.
- Tarjetas de crédito. No importa lo que diga el cobrador de la tarjeta. Puede esperar.
- Préstamos personales. Si no tienes un colateral en el préstamo que sea esencial para vivir, también puede esperar.
- Prestamos de estudiantes que puedes diferir. Si tienes tus préstamos de estudiante al día podrías pedir una extensión de pago o diferirlos durante un tiempo. Pero habla con ellos para evitar hacerlos enojar, porque este perro no solo ladra, si no que muerde.
- Cuentas médicas o legales. Los hospitales son bastantes flexibles con el pago de sus deudas. Habla con ellos y es muy posible que puedas llegar a algún arreglo.
- Cualquier otra deuda que no tenga un colateral importante. Si no pusiste tu riñón izquierdo como colateral al momento de tomar la deuda, seguramente puede esperar. Habla con el acreedor y explica tu situación. Envíales copia de tu presupuesto y déjales saber que en cuanto tu situación cambie les vas a pagar.
Es tiempo de crisis
En los tiempos de crisis no se vive de forma normal. Una vez logras cortar tantos gastos como sea posible, busca aumentar tus ingresos. Es la combinación de gastar menos y ganar más lo que te va a permitir salir de la crisis financiera más rápidamente.
