Los ahorros automáticos y tú
El ahorro automático que promueven muchos bancos es un concepto interesante, pero no los necesitas a ellos para lograrlo. Yo no soy muy fanático de las cosas automatizadas cuando se trata de los bancos. Ellos son muy buenos para sacar dinero de tu cuenta, pero toma mucho tiempo para devolverlo. Por esto yo prefiero hacer las cosas a la antigüita.
Cuando uno comienza a hacer un presupuesto, siempre existe la tentación de comenzar a hacer algo tan detallado que examine hasta los detalles más mínimos. Pero la verdad es que esto no dura mucho. Y el mayor reto que enfrentas es el de cómo hacer un presupuesto que sea funcional.
Una opción puede ser la de redondear las cantidades de la misma forma que lo hacen los bancos cuando sacan un ahorro automático. El banco hace esto redondeando las cantidades que gastas cuando compras algo. O sea si compras algo de $2.59 los otros .41 para redondear a $3.00 el banco automáticamente lo envía a ahorros. Esto es bueno pero difícil de presupuestar, ya que nunca sabes cuánto dinero va a entrar a tu cuenta de ahorros mensualmente.
Otra opción es la de que tú mismo incluyas ahorro en tu presupuesto. Esto lo puedes lograr si decides redondear lo que gastas en tu presupuesto. Digamos que presupuestas $5 diarios para el almuerzo en tu trabajo, pero solo gastas $4.75. Diariamente estas ahorrando .25, al final del mes son $5 extra. Si llevas esto de centavos a un par de dólares, el efecto se multiplica. Digamos que presupuestas $80 mensuales para el pago del agua, pero tu cuenta es solo $75.50 al final del mes vas a tener una buena cantidad ahorrada.
Este mismo proceso lo puedes hacer en casi todas las áreas de gastos fijos. Eventualmente vas a tener un pequeño (con el tiempo no tan pequeño) fondo para cubrir los gastos inesperados. Este fondo puede ayudar a cubrir algún error en tu presupuesto.
Siempre que hablo del presupuesto me gusta aclarar que el primer mes que hagas un presupuesto no te va a funcionar. Toma varios meses para lograr encontrar el balance correcto en él. Pero, recuerda que un presupuesto que funciona al 50%, todavía es 50% mejor que no tener un presupuesto. Entonces, comienza con tu presupuesto lo antes posible. Por último, ya que estamos claros que no eres perfecto y vas a cometer errores, el tener una pequeña cantidad de dinero como un colchón entre tú y tus imperfecciones es una gran idea.
(Crédito de la Foto)